La conferencia Este es la primera que ya ha dejado decididos los ocho equipos que tratarán de llegar a la final de la NBA, un largo camino que al final ha permitido a los Wizards llegar a buen puerto, eso si, no sin una marejada interna que invita a pensar que la deriva de este equipo llegará rápido en la primera ronda, staff técnico y algún jugador importante apuntan que es imposible jugar de forma egoísta, ¿toque de atención para la dupla Beal-Wall?, cuatro derrotas consecutivas no es el mejor balance para encarar un playoff con garantías. El sorpasso de los Sixers a los Cavs en este tramo de temporada ha de materializarse en la última jornada, guiados por un Ben Simmons ávido por obtener el premio de rookie del año, sería una injusticia no obtener la tercera plaza. Dura piedra en el camino sería para Cleveland enfrentarse a unos impredecibles Pacers, la dimensión de Oladipo puede hacerle llegar al siguiente nivel, su gran oportunidad se presentaría delante de él, enfrente Lebron, palabras mayores.

Del tercero al séptimo en el Oeste deben concretar el orden final en la clasificación, minucias comparado con el drama que hubiese supuesto la eliminación. Balón de oxígeno para Spurs y OKC, eternos aspirantes que han jugado al límite asomando a un abismo que hubiese supuesto un gran varapalo en ambas franquicias, aunque intuimos que la gestión del fracaso hubiese deparado grandes diferencias entre las dos. Premio e inyección de moral para Pelicans y Jazz, confirmaciones que los cambios en ocasiones suelen suponer un paso adelante en la carrera de los jugadores, Mirotic y especialmente, un inspirado Ricky Rubio aparecerán por primera vez en los playoff del salvaje Oeste.

La madrugada del miércoles al jueves todas las miradas se centrarán en Minnesota, donde los Wolves recibirán a los Nuggets en un enfrentamiento que determinará el último clasificado para playoff y rival de los Rockets en primera ronda. Con ambos equipos empatados no hay opción posible al error, la tensión será máxima, ‘win or go home’. Sería un duro revés para una gran temporada de los Wolves aunque empañada por un final bastante irregular. Hace un mes su clasificación se daba por hecha, pero llegamos al último partido jugando a la ruleta rusa. Una dinámica diametralmente opuesta a la de Denver, por los que nadie apostaba hace un mes y que de la mano de un salvaje Jokic han conseguido optar a esa última plaza, hagan sus apuestas, y cojan palomitas, el espectáculo será épico.

Fin de trayecto y alivio mental para los grandes fracasos de la temporada en la NBA, tiempo de reconstrucción y duro trabajo en el gym para no volver a caer en el pozo de ser los peores equipos de la liga. Memphis, Dallas, Knicks, Suns, Bulls, todos ellos también con un ojo puesto en uno de los drafts más atractivos de la última década. Otros equipos ya empiezan a realizar sus primeros cambios, los Hornets de Jordan han decidido contratar como GM y Presidente a Mitch Kupchak, quién tratará de obtener el mismo éxito que tuvo en Lakers. Movimiento valiente, y coherente, su gran reto vendrá en el verano de 2019 con Walker, Howard, o Kaminsky finalizando contratos…
